domingo, 25 de agosto de 2019

Microrrelato: Ensueño


ENSUEÑO


Al caer la noche nos encontramos, dos náufragos sin embarcación, dos apasionados de la belleza natural del mundo. Compartimos experiencias y entrañables recuerdos de grandes aventuras. Dormimos arropados por un manto de estrellas imperecederas, y al llegar la mañana las hadas vinieron a recogerte. En cuanto a mí, emprendí el camino de regreso. 

Un año pasó y el calor del verano reavivó tu recuerdo con sus llamas. En otro monte distinto te busqué, guiándome por el aroma de las flores silvestres y el canto de los pájaros. Recorrí las rutas, esperanzado y ansioso por revivir un momento fugaz atrapado en una ensoñación febril. 

Perdí la orientación. Me adentré cada vez más en un hermoso y desconocido mundo. Sin embargo, presa del cansancio, mi cuerpo no pudo dar más de sí y me derrumbé sobre una loma olvidada. 

Una estrella fugaz me halló exhausto y me recogió con suavidad para ponerme a salvo. 

Al abrir los ojos contemplé el infinito. Al incorporarme descubrí que no estaba solo. Otro rostro me miraba con tus ojos, otros labios me mostraban tu sonrisa. Creamos un nuevo recuerdo, sabiendo que, si te desvanecías con la luz del alba, el próximo verano te traería de vuelta.